miércoles, 21 de abril de 2010

NO.



Solo existe una emoción tan aleatoria como el mundo que nos rodea, tan imprevisible y azarosa como nuestro nacimiento, tan cambiante como nuestra fisiología molecular, tan irreprimible como las fuerzas básicas de la naturaleza, tan emblemática del sentimiento de victoria como la música del aria de Puccini Nessun dorma, tan responsable de abismos sentimentales como el rostro de un hijo que descubre el asesinato gratuito y vil de su madre. Una emoción desconcertante hecha a nuestra medida que tiene, ademas, el efecto insospechado de colmar con su aliento todo el inmenso vacío, uniendo, como dos moléculas de agua al helarse, a dos seres hasta entonces absolutamente solitarios. Los físicos lo llaman una transición de fase: una reordenación abrupta y espectacular de la materia. Para el común de los mortales es la emoción básica y universal, el amor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

"La devastadora ideología de la imagen y de lo grotesco que ha señoreado en los ochenta y principios de los noventa, ha conseguido desposeer a muchas víctimas de la moda de su personalidad" Giorgio Armani

Followers