martes, 16 de marzo de 2010

Verde que te quiero verde.


Recuerdo aquella noche perfectamente, el verde neón invadía la sala y tu camisa de cuadraditos también verde cual leñador habló por si sola, solo fue un leve roce pero suficiente para mostrarme el deja vú de todo lo que acontecería después, historia breve pero intensa, ni siquiera percibí todo lo que se me venia encima, sin apenas una palabra que al menos fuera seria, el edén de tu cuerpo rezumaba pasión por todos sus poros y tu inequívoco perfume no tardó en hacerme prisionero pues quien iba a resistirse a esa figura déspota y arrogante pero encantadora y atrayente de igual modo, fue breve y frugal, el tiempo nos borró pero a pesar de todo no me cabe la más mínima duda de que el destino nos volverá a unir, y se que no será pronto, pero tu despotismo ilustrado volverá a hacerme su víctima y esta vez, el sangrado será mucho mas placentero entre tus sábanas de algodón egipcio y tu agua de mil dólares.

3 comentarios:

  1. :) Corto pero intenso... De esos son de los que uno más se acuerda

    ResponderEliminar
  2. Muy bonito estoy de acuerdo con lo que ha puesto el coment de arriba es un historia corta pero con intensidad de las que siempre se guardan en la memoria.

    ResponderEliminar
  3. GUAU. Es curioso como a veces olvidamos las cosas que duraron un largo tiempo y recordamos las que fueron tan breves. Me encanta :)

    ResponderEliminar

"La devastadora ideología de la imagen y de lo grotesco que ha señoreado en los ochenta y principios de los noventa, ha conseguido desposeer a muchas víctimas de la moda de su personalidad" Giorgio Armani

Followers